El ballet El Cascanueces se representó por primera vez sobre las tablas de un escenario el 18 de diciembre de 1892. Hoy se «representa» en las letras de Google, modificadas en su portal principal con un nuevo doodle del buscador que rinde homenaje al clásico navideño de Chaikovski en su 120º aniversario. Fue en el Teatro Mariinski en San Petersburgo donde el ballet El Cascanueces vio la luz, de la mano del bailarín y coreógrafo francés Marius Petipa, quien se encargó de crear la coreografía de la música compuesta por el gran maestro ruso Chaikovski. El compositor se inspiró en la historia de Theodor A. Hoffman, que había sido adaptada por Alejandro Dumas padre, El cascanueces y el rey de los ratones y engendró una espectacular obra de fantasía que hoy, a través del doodle, sumerge a los usuarios de Google en un profundo viaje por el mundo de los sueños. En la fusión de las plumas de Hoffman y Dumas, de la música de Chaikovski y del baile de Petipa radica la magia del ballet El Cascanueces, convertido ya en todo un clásico navideño, recuperado hoy por Google en uno de sus habituales doodles y considerado por muchos el último gran ballet romántico. Junto a estos cuatro genios responsables del éxito del ballet -a pesar de que la gran gloria del ballet El Cascanueces ha recaído siempre en Chaikovski- podría también contarse a Lev Ivanov, asistente de Marius Petipa, que continuó su trabajo en la obra ilustrada hoy en el doodle de Google cuando una enfermedad le obligó a concluir su trabajo en ella.
El ballet El Cascanueces recrea a través de la danza la historia de una niña y su muñeco de madera, que acabará conduciendo a la pequeña que hoy saluda a los internautas desde el doodle de Google por un mundo maravilloso de magia y de sueños. El tío de la pequeña Clara, protagonista del ballet El Cascanueces, le regala el pequeño muñeco de madera en la víspera de Navidad, un presente que su hermano Fritz trata de romper. Cuando la niña va a visitar al Cascanueces bajo el árbol, este crece cobrando vida y todo a su alrededor se vuelve real, aparece un ejército de ratones y se lleva a cabo un gran batallón donde el Rey de los Ratones, también representados en el doodle que hoy decora el logotipo de Google, se ve derrotado. Clara se precipita entonces, junto a su Cascanueces, en un mundo fantástico donde compartirán aventuras con personajes únicos.
La traducción musical de la hazaña de la pequeña Clara y su Cascanueces a manos de Chaikovski transmite todo un mundo de sensaciones en cada uno de los personajes que enhebran la historia de el ballet El Cascanueces. Piezas como El Vals de las Flores, La Danza Árabe, La Danza Rusa y El Hada del Azúcar forman parte del imaginario popular en cuanto a cuentos de Navidad se refiere, notas que, sin querer, evocan la magia que envuelve al ballet ruso y que hoy vuelven a nuestra mente gracias al colorido doodle con el que Google ha amanecido esta mañana.
Pero no todo fue gloria para el ballet El Cascanueces, que al principio recibió duras y sólidas críticas. La mayoría tenían que ver con la creencia de que la versión musical de Chaikovski no se adaptaba fielmente al cuento del alemán, pero la brusca transición entre el mundo terrenal de la primera escena del ballet El Cascanueces y el mundo de fantasía del segundo acto no fue bien recibida y obligó a reducir la obra a solo dos actos. Sin embargo, cuando echó a andar, la representación se convirtió en todo un éxito, vivo aún hoy en día, 120 años después. La obra ha sido representada por inumerables compañías de todo el mundo y ha recalado en importantes teatros, donde pequeños y mayores, e incluso Google, el buscador más popular, se han rendido a la historia de la pequeña clara y su Cascanueces de madera.